Día 2: ¿Cuál ha sido tu mejor sesión? ¿Porqué?

Muy difícil, elegir una entre tantas buenas es harto complicado. Comentaré una como Director de Juego y otra como Jugador.

Empecemos con la fácil, ejem, como jugador. Quizá no es la mejor de todas, pero sí la mejor que me viene ahora mismo a la mente. Podría decirse que no fue solo una sesión sino más bien toda la partida, pero si tengo que destacar una sesión de todas las jugadas, destacaría la que nos colamos en casa de un noble aragonés en Aquelarre que resultó ser una trampa dispuesta por un brujo aliado suyo en la que tuvimos que enfrentarnos a un bafometo, que viene a ser una criatura infernal que se compone de una cabeza enorme y dos pares de pies, murieron 2 compañeros y otro quedó gravemente herido, yo en este caso, que tras una lucha épica me dejó cojo y con la cabeza medio masticada, a todo lo cual sobreviví gracias al compañero que me sacó a rastras.

Podría pensarse que no fue la mejor sesión, pero para mi sí que lo fue, no careció de momentos épicos y además fue la que inició la leyenda de ese personaje, que tras las graves heridas de ese combate y alguna más que arrastraba al final consiguió convertirse en un humilde señor con tierras, cuando había comenzado como un simple hidalgo sin futuro. La mejor por ser la más significativa.

Como DJ (Director de Juego) ha habido muchas, con grandes campañas de creación propia respaldándolas, pero de las que mejor recuerdo es una en concreto de Superhéroes INC (aquellos que digan que el género superheróico no da de sí, que pregunten a mi grupo de siempre de jugadores), una batalla épica entre dioses de diferentes panteones englobada en una saga de aventuras ya de por sí épica, en la que el principal protagonista, en teoría, era el dios íbero que da nombre a este blog y que acompañado por sus compañeros mortales (mutantes, pero mortales) intentaban aportar su granito de arena a su causa, y que en la misma consiguieron ganarse el protagonismo y el respeto de algún que otro dios por las hazañas realizadas en la misma.

Una partida llena de espectacularidad y sobradas a todos los niveles en las que los jugadores se lo pasaron como críos al mismo tiempo que temían las tiradas de dados contra ellos sabiendo que luchaban entre gigantes.